El paro es muy malo y Ghost Trick mola

Resumen de mi vida en esta temporada gafe que inauguré cuando me llamaron de una entrevista interesante la única semana en la que estaba en la otra punta del país:

-Sigo en paro. Me llaman de una entrevista que es un timo (me lo ha chivado google, así que no me molestaré en ir). Me llaman de otra que parece que no lo es (dependienta, nada emocionante relacionado con la cría de amebas). La entrevista sigue en pie (¿dejaré de ser gafe?)pero el hermoso estado verde de finalista en infojobs, acaba de cambiar al rojo pollo ensangrentado de descartado. El lunes descubriré si la informática es aún peor de lo que suponía o si me llaman para perder el tiempo. Yeah.

-Citas con el dentista. Snif, snif. Pagar para que te pinchen, te trasteen con aparatos del averno... esto es de masocas.

-Y ya está. Pensaba que había más cosas en el listado gafe, pero si las hay se me han olvidado. Así que pasemos a lo interesante.

-¡Ghost Trick!Pero qué vicio de juego. He pasado la parte terrible de esquivar guardias de seguridad (Indy, dile a la rubia que se lo dedico) y ahora estoy en la recta final (a la espera de quedarme a solas y poder disfrutar del juego como es debido, que si no me interrumpen siempre).

-¡Tengo pies! ¡Y ojos! No hay nada como ser consciente de que uno es un ser completo. Recordad, cada mañana hay que buscar unos minutos para dar gracias al orangután devorador de tostadas por el hecho de estar vivos y no ser informáticos (los que lo sean, que den gracias por el hecho de que les siga dirigiendo la palabra).

-¡Canción de hielo y fuego! Reconozco que era reticente a leerlo, por el hecho de que el tema de fantasía me tenía un poco harta últimamente. Pero cuando Scullyween y la pìja comparten una misma opinión, hay que hacer caso. Voy por el tercer libro y la verdad es que no está mal. No me parece una obra maestra (al menos, no la obra maestra que parece ser para muchos), pero es bastante entretenido, me gusta. Ahora que ha empezado también la serie me entretengo viéndola y rajando con estas dos merluzas sobre la buena o mala adaptación que han hecho.

-¡Una tarta! No tengo ninguna, pero habría estado bien.

-¡Jancio! Esta cosa informática despierta mi amor y mi odio a partes iguales. Nunca le perdonaré el ser binario. Pero pese a ello, seguiré adorándolo como el primer día. Bueno, mejor como los días de muchos meses más adelante, porque el primer día no lo adoré en absoluto, las cosas como son. Eso sí, si me estás leyendo (que lo dudo), que sepas que eres un cacho melón de secano que merece sufrir la ira del pseudodragón. Compórtate como un novio, como un hombre o como algo que merezca la pena. ¡Y dame mil euros!

-¿He dicho Jancio? Oh, sí. Pero es que es tan cutre y achuchable al mismo tiempo. Ñam.

-¡Okamiden! Saturada de tanto RPG (prácticamente no jugaba a otra cosa desde hacía años) estoy aprovechando la DS para jugar a algo que no tenga turnos. Y este título es una opción estupenda. El protagonista es la cosa más adorable del mundo (no es Jancio, tampoco soy yo, pero da igual) y el estilo gráfico me encanta. Además, por ahora, es bastante asequible en lo que a dificultad se refiere, así que no siento ganas de maltratar al primero que ose mirarme (y que por simple estadística de probabilidad, todos sabemos quién iba a ser).

-¡Escribo de forma más o menos responsable! Me propuse actualizar más de dos veces por mes y lo estoy consiguiendo. Sigo sin poner cosas serias ni interesantes, pero me importa bien poco. Es mi blog y pongo lo que quiero. Como si quiero poner almohadillas. Mirad.


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¡Ja!

En fin, que esto iba a ser un resumen y al final os estoy contando mi vida entera. Sirva esta entrada como explicación periódica de lo que voy haciendo por estas tierras del norte (donde la gente come cosas) y como actualización cutre del blog.


PD: Le regalo una historia a Indy. Esto era un camarón disfrazado de loncha de queso que mutó en tecla de Supr y murió. O eso es lo que quiso que todos creyeran... uhhhhh...